Aún sigo poniéndome al día de la vuelta de vacaciones. Repasando índices mundiales me ha llamado la atención la situación del Merval argentino.
A primera vista puede parecer sólido, cerca de máximos anuales, pero si abrimos el gráfico nos encontramos con un «déjà vu» con el comportamiento del 2007.
Al igual que entonces, se había producido una subida fuerte anterior y durante meses hizo un desplazamiento lateral. Pero hay más coincidencias técnicas, vamos con ellas.
En el desplazamiento realizó tres máximos ascendentes ligeramente superiores. Ya no se subía con tanta alegría y las roturas de máximos a penas consiguieron desplazar al alza al índice, típico síntoma de distribución.
Después de marcar nuevos máximos se produjeron bajadas de importancia que incluso rompieron mínimos anuales anteriores, pudiéndose dibujar un triángulo divergente.
Tras el tercer máximo ascendente se produjo una corrección muy fuerte y vertical que le llevó a romper la media de 200 sesiones de forma definitiva, después de lo cual se rebotó para hacer pull-back a la media rota.
En el rebote se pudo trazar una directriz alcista de poca inclinación que, una vez rota, produjo un desplome de las cotizaciones.
He puesto el RSI30 y tanto entonces como ahora mostró una clamorosa divergencia bajista que no trajo nada bueno.
Viendo el gráfico de los últimos meses, la única diferencia es que la segunda corrección no llegó a la línea inferior. Por lo demás la situación es casi idéntica. ¿Casualidad o aviso a navegantes de lo que puede suceder en los próximos meses?…
Resumiendo, mientras no pierda los 2150-2200 puntos está lateral-alcista. Por debajo de esos niveles y, sobre todo, de los mínimos anuales en los 2050 puntos, podría tener bajadas de importancia con un primer objetivo en los 1860 puntos, mínimos de enero de 2008 y 38% de retroceso de la subida previa.
Por arriba resistencias cada 100 puntos en los 2400 puntos, máximos de enero de este año, 2500, máximos anuales y 2600 directriz alcista dibujada. La superación de los 2400 puntos, junto con una rotura sólida del RSI30 de la directriz bajista mejoraría la situación técnica.
